De la Web 1.0 a la 4.0
“David Siegel, en su libro
Creating Killer Web Sites: The Art of Third-Generation Site Design, estableció
tres generaciones de sitios web. Sin embargo, desde 1996, fecha en la que
estableció su clasificación, ha evolucionado la tecnología empleada en la Web,
por lo que se puede añadir una generación más a su clasificación. Actualmente las cuatro generaciones conviven,
aunque ya casi nadie crea sitios web que se clasifiquen en las dos primeras generaciones”
Durante los primeros cinco años
la web sólo servía para leer, para consumir contenidos, es decir, no existía
mucha interacción con las páginas web. Sin embargo, cuando se añadieron los
formularios la web comenzó a cambiar. Los formularios permitían un mayor grado
de interacción entre el usuario y las páginas web. Además, el lenguaje HTML
incorporó la posibilidad de añadir nuevos tipos de contenidos a las páginas web
como audio, vídeo o animaciones y, los navegadores web se volvieron más rápidos
y potentes. Todo ello ayudó a que las páginas web se transformarán en
aplicaciones web, en inglés, Web Apps, que permiten realizar a través de una
página web las mismas tareas que tradicionalmente se realizaban mediante un
software instalado en un ordenador partir de un CD-ROM.
WEB 1.0
La primera generación abarca
desde el nacimiento de la Web hasta mediados de 1994. La creación de páginas
web durante esta generación se ve limitada por diversas razones tecnológicas: ancho
de banda limitado (módems de 2.4 Kbps), navegadores poco desarrollados,
monitores monocromos, etc.
Las características principales
de estas páginas son:
·
Tiempo de carga rápido: son páginas basadas en
texto, con muy pocas imágenes y ningún recurso multimedia.
·
Navegación poco estructurada, con falta de
coherencia.
·
Páginas largas, que parece que nunca se acaban.
La información no se suele organizar en varias páginas, ya que así se reduce el
número de transferencias.
·
Texto escrito como si fuera una hoja de papel:
de lado a lado de la página y desde el principio hasta el final.
·
Empleo de saltos de línea como separadores.
·
Empleo de líneas horizontales para separar
secciones en una misma página.
·
Empleo de listas para organizar la información.
·
Poco uso de los enlaces entre páginas de un
mismo sitio web.
·
Como las páginas son muy largas, se emplean
muchos enlaces intradocumentales.
·
Listas interminables de enlaces a otros sitios
web.
·
Se pueden visualizar correctamente casi en
cualquier navegador (incluso los navegadores no gráficos), pero son aburridas y
poco legibles.
·
Las páginas web poseen un contenido educativo o
científico. Pocas empresas poseen un sitio web.
En definitiva, durante este primer
periodo, se emplea la Web como si fuera uno de los medios de comunicación
tradicionales (libros, revistas, etc.). Aún no se sabe cómo aprovechar todas
las posibilidades que ofrece la Web.
Respecto a la generación de las páginas,
no existe generación: las páginas son estáticas. A finales de este primer
periodo aparece la tecnología Common Gateway Interface (CGI), que permite la
generación dinámica de páginas web.
En la imagen 13 y 14 es posible observar dos ejemplos de páginas pertenecientes a la primera
generación. Se pueden apreciar en estas páginas las principales características
de esta generación: páginas simples, poco o nulo empleo de elementos gráficos,
empleo de listas para organizar la información, empleo de líneas horizontales como
separadores, etc.
Imagen.
Ejemplo de página web de la primera generación. |
WEB 2.0
Los términos web 2.0 y web social
aluden a aquellos sitios web que facilitan compartir información, la interoperabilidad,
el diseño centrado en el usuario y la colaboración en la World Wide Web.
Permiten a los usuarios interactuar y colaborar entre sí, como creadores de
contenido. La red social de este tipo ya no es entonces un simple contenedor o
fuente de información, y se convierte en una plataforma de trabajo
colaborativo. Ejemplos son las comunidades web, los servicios
web, las aplicaciones web, los servicios de red
social, los servicios de alojamiento de videos, las wikis,
los blogs, las mashups y las folcsonomías.
“El término fue inventado por
Darcy DiNucci en 1999 y luego popularizado por Tim O'Reilly y Dale Dougherty,
en una conferencia sobre la web 2.0 de O'Reilly Media en 2004. Aunque el
término sugiere una nueva versión de la World Wide Web, no se refiere a una
actualización de las especificaciones técnicas de la web, sino más bien a
cambios acumulativos en la forma en la que los desarrolladores de software y
los usuarios finales utilizan la web. El término surgió para referirse a nuevos
sitios web que se diferenciaban de los sitios web más tradicionales englobados
bajo la denominación web 1.0. La característica diferencial es la participación
colaborativa de los usuarios”
Imagen. Nube de
etiquetas de conceptos de la web 2.0
El sitio web 2.0, en lugar de limitarse a ofrecer al usuario la posibilidad de leer sus contenidos, le invita a contribuir, por ejemplo, comentando los contenidos o creando una cuenta o un perfil en el sitio, que a su vez puede inducir una participación aún mayor. Al hacer más hincapié en estas prestaciones, por otra parte, ya existentes, alientan a los usuarios a recurrir más a su navegador web para emplear funcionalidades de interfaz de usuario, software de aplicación (apps) y almacenamiento de archivos, en lo que O'Reilly denominó la computación de «red como plataforma» (network as platform)
Algunas de las principales
características de la web 2.0 son los servicios de redes sociales, las
plataformas de autopublicación (por ejemplo, las herramientas de WordPress
de creación de blogs y sitios web), las etiquetas (funcionalidad que permite
añadir metadatos a páginas web o contenidos multimedia), el botón
«me gusta» y la calificación de contenidos (que permite al usuario expresar su
opinión sobre el contenido) y los marcadores sociales.
Los usuarios pueden proporcionar
los datos y ejercer cierto control sobre lo que comparten en un sitio web 2.0.
Estos sitios pueden disponer de una «arquitectura de participación» que anima a
los usuarios a añadir valor a la aplicación a medida que la utilizan, por
ejemplo, comentando un artículo en un sitio web de noticias, subiendo una
fotografía relevante a un sitio de viajes o añadiendo un enlace a un contenido
relevante en una discusión.
La Web 2.0 se caracteriza
principalmente por la participación del usuario como contribuidor activo y no
solo como espectador de los contenidos de la Web (usuario pasivo). Esto queda
reflejado en aspectos como:
·
El auge de los blogs.
·
El auge de las redes sociales.
·
Las webs creadas por los usuarios, usando
plataformas de auto-edición.
·
El contenido agregado por los usuarios como
valor clave de la Web.
·
El etiquetado colectivo (folcsonomía, marcadores
sociales...).
·
La importancia de la larga estela o larga
cola.
·
El beta perpetuo: la Web 2.0 se inventa
permanentemente.
·
Aplicaciones web dinámicas.
·
La World Wide Web como plataforma.
Adicionalmente a las
aplicaciones, por la forma en que se utilizan en la Web 2.0, el usuario ya no
depende de que el software que ocupa regularmente o la información con la que
trabaja habitualmente, estén instalados en su computadora; en vez de eso,
aprovecha el almacenamiento en la nube para acceder a los datos y
aplicaciones personales a través de sitios que lo identifican de forma única
por medio de un usuario y una contraseña.
Con esta característica,
utilizando herramientas Web 2.0 el usuario no depende de un único equipo de
cómputo ni de una ubicación geográfica, ya que puede tener acceso a toda su
información desde cualquier equipo en cualquier parte del mundo donde tenga
conexión a Internet.
Las herramientas 2.0
(herramientas colaborativas y sociales) suponen un avance tecnológico
importante.
WEB 3.0
“La web 3.0 es el tipo de
internet más actual, cuyas características principales son la democratización y
que basado en la tecnología de la web semántica. Dicha web está construida a
través de una cadena de bloques descentralizado donde no existe una propiedad
centralizada del contenido o las plataformas”
La web semántica, realiza un
proceso de filtrado automático de los datos, lo que implica que las máquinas
comprendan el significado de la información que contiene la web y así, procesen
la información de manera más rápida, precisa y eficiente.
Un escenario al que se aspira con
la llegada de la web 3.0, es que cada usuario tenga un perfil personal en
internet basado en su historial de búsquedas, mismo que se usará para brindarle
una experiencia de navegación única. De esta manera, al colocar dos personas
los mismos criterios de búsqueda en un servicio, cada una recibirá distintos
resultados conforme a sus perfiles personales.
La situación que propicia la
aparición de esta nueva etapa web es la necesidad de un internet más
inteligente, en el que los usuarios encuentren resultados realmente cercanos y
relevantes.
Algunos ejemplos de aplicaciones
que fueron el boom de la web 2.0 son: Chrome, Drive, Dropbox, Skype, Twitter,
Whatsapp y Facebook mientras que en la web 3.0 entran las denominadas DApps,
que son aplicaciones descentralizadas, es decir, plataformas que permiten a los
usuarios interactuar sin una entidad central que administre el servicio; tal es
el caso de: Experty, Akasha, Status, COS y Brave.
“Esta tercera generación permite
que las aplicaciones web se conecten entre sí para personalizando la navegación
de cada persona. El desarrollo de tecnologías como Big Data, Inteligencia
Artificial y Blockchain está favoreciendo el impulso de esta evolución de la
web, y están perfilando realmente qué es.
A través del uso y aplicación del almacenamiento y análisis de datos, y
sobre todo el aprendizaje automático, se puede crear ese perfil único de cada
usuario que mejore la experiencia de navegación”
Como la web 3.0 está vinculada a
la Inteligencia Artificial, la mayoría de sitios webs desarrollados con esta
tecnología tienen la capacidad de conectarse entre sí, teniendo en cuenta los
intereses y objetivos del usuario. Además, los expertos aspiran a crear un
espacio personalizado para cada usuario. De esta forma, internet se llenará de
experiencias de navegación únicas.
Aunque no existe una definición
concreta, si hay unas características muy significativas:
·
Inteligencia: la web 3.0 pretende crear un
modelo de clasificación de las páginas mediante un sistema de etiquetado, de
esta forma, los buscadores podrán encontrar y entender la información. Con este
objetivo el usuario accedería a la web en su propio lenguaje sin necesidad de
introducir claves.
·
Facilidad: por lo general, los usuarios que
visitan un sitio web emplean un cierto tiempo para adaptarse a ella. Ahora se
busca estandarizar las páginas, con el fin de homogeneizar las funciones y
facilitar la navegación.
·
Tridimensionalidad: esta tecnología pretende
incorporar al día a día de los usuarios los espacios tridimensionales. Con
ella, aparecen nuevos dispositivos para moverse con facilidad por la web,
dejando atrás el teclado y ratón tradicional.
·
Abierta: el software libre, los estándares y las
licencias Creative Commons son habituales en el entorno digital, para seguir
impulsando la libre distribución de información. Por tanto, se trabaja a favor
del uso democrático de la información.
Principales aplicaciones Web 3.0
“Aunque hay una parte de esta
tecnología que se encuentra en pleno desarrollo, también es importante saber
que las aplicaciones Web 3.0 ya se han materializado”
Aprendizaje automático. En los últimos años, la Inteligencia
Artificial han obtenido un gran protagonismo. Ambas están vinculadas al
concepto Web 3.0, un ejemplo significativo son los asistentes como Siri.
Gracias al procesamiento automático de lenguaje natural, el asistente
inteligente puede analizar, hablar e interactuar con los usuarios. El
aprendizaje automático también se emplea junto a otras herramientas
tecnológicas como Internet de las Cosas (IoT) y Big Data para procesar grandes
cantidades de datos.
Blockchain. La Web 3.0 ha ayudado a desarrollar la estructura
matemática más segura para los usuarios, el Blockchain. Esta tecnología ha sido
ideada para almacenar datos, de tal forma que es casi imposible falsificarlos.
Es un libro electrónico público que se puede compartir libremente entre
usuarios diversos, y además crea un registro inmutable de sus transacciones. El
Blockchain proporciona una red ultrasegura, puesto que los datos son
transmitidos de manera encriptada. Las cadenas de bloques son eficientes,
veloces e impulsan el desarrollo de contratos inteligentes.
Tokens no fungibles (NFT). Los NTFs son una forma de criptografía, y
cada NFT es único e intransferible. Además, están vinculados a activos
digitales o físicos, por tanto, tienen titularidad y propiedad. Su crecimiento
está siendo muy importante en áreas como el arte o la moda, no obstante, hoy en
día no se encuentran regulados por ninguna autoridad o institución legal.
Metaverso. El metaverso es otra aplicación que se
interconectará con esta web semántica, ya que es una visión general de cómo
será la interfaz de la Web 3.0. Principalmente, dependerá en gran medida de la
Realidad Virtual, VR, y la Realidad Aumentada, AR, para crear una experiencia
inmersiva, mezclando los elementos digitales con el mundo natural.
Criptomonedas. La oferta de criptomonedas es otra conocida
aplicación y se conocen como tokens de Web 3.0. Su principal objetivo es
brindar al usuario un mayor control sobre su contenido digital con la ayuda de
una infraestructura centralizada. Actualmente, las monedas digitales no están
controladas por ningún gobierno, excepto en el Salvador, autoridad central o
entidad bancaria. Las criptomonedas emplean la tecnología Blockchain para
registrar el número de monedas existente y quién tiene qué cantidad.
La Web 3.0 se centra en el análisis
de los datos y en su comprensión basada en máquinas para proporcionar una web
semántica. Gracias a ello, las webs serán más inteligentes y abiertas y estarán
más conectadas y adaptadas a los usuarios. Se espera de ella una mayor
accesibilidad.
WEB 4.0
“Web 4.0, Internet contextual,
Internet ambiental… se llame como se llame hay una nueva Internet en marcha, es
más, se podría decir que es imparable, ya que dicha Web será posible
encontrarla, por ejemplo, en esa cafetera conectada a la red que tiene a punto
el café cuando se le indica. O en esa puerta que se abre automáticamente
mediante NFC”
Es posible mirar con
escepticismo, por supuesto, una cuarta generación de Internet ya que aún está
en sus primeros pasos. Pero los principales estadistas apuntan hacia una
dirección clara, una donde el 10% de la población mundial cuente con algún tipo
de prenda de vestir comunicada con Internet e incluso ese Internet of
Everything disponga de mayor ubicuidad que el agua potable o la electricidad.
De esta forma podríamos definir a
la Web 4.0 como la Web de las máquinas que entienden a los humanos y que
aprenden cuanto más se usan (machine learning); la de los pequeños bots, de los
agentes inteligentes que chatean cual humanos, de las casas inteligentes, de
las smart cities, etc.
Es complicado fijar en el
calendario una fecha en la indicar que a partir de ese día todo cambió, pero
podríamos decir que internet empezó a transformarse en marzo del 2016 cuando
Google implementó los resultados semánticos en las búsquedas. En ese momento,
por primera vez, un buscador mostraba que era capaz de entender la pregunta
realizada por un usuario para poder ofrecer así una respuesta exacta, en lugar de
mostrar páginas en las que se encuentran las palabras que ha buscado el
usuario. Puedes hacer una prueba preguntando a Google (por voz o por escrito)
“¿Qué edad tiene Messi?” o si “¿lloverá mañana en Naucalpan?”. En ambos casos
Google responderá con un respuesta clara y sencilla, en lugar de mostrar
resultados en los que el sitio web contiene las palabras que estamos buscando.
Ahora entiende estas palabras y responde con sentido.
Otro hito que marcó el cambio
hacia una nueva internet fue en mayo de ese mismo año cuando Facebook autorizó
por primera vez la conexión de un chatbot a su Messenger, permitiendo así a los
usuarios de su servicio de mensajería mantener conversaciones con agentes
robot. Aunque hay que tener en cuenta que SIRI (la inteligencia artificial de
Apple), fue una pionera y ya funcionaba en su versión rudimentaria desde el año
2011.
Características de la Web 4.0
La Web 4.0 se fundamenta en
cuatro pilares fundamentales:
1.
Comprensión del lenguaje natural (NLU) y
técnicas de Speech-to-Text.
2.
Nuevos modelos de comunicación máquina-máquina
(M2M). La red estará formada por agentes inteligentes en la nube, que serán
capaces de comunicarse entre sí y delegar la respuesta al agente adecuado.
3.
Uso de información de contexto del usuario.
Sentiment analysis,
geolocalización y sensores.
4. Nuevo modelo de interacción con el usuario. Para que la Web no se convierta en un mero almacén de información, son necesarios nuevos modelos de interacción, o incluso ejecutar acciones concretas que den respuesta a las necesidades de los usuarios, haciendo hincapié en su uso sobre dispositivos móviles.
Imagen. Internet ambiental. |
“Este «Internet ambiental» supone la etapa final de aquel
viejo servicio que interconectaba ordenadores y personas. Ya no escribiremos
«taxis en CDMX». Con decir «venir a recogerme» el servicio entenderá que estás
buscando un servicio público, utilizará tu posicionamiento GPS y te ayudará. El
resto es cosa suya. Porque no estamos hablando de un servicio pasivo, sino uno
inteligente, uno que analiza la pregunta y estructura la respuesta en torno a
los distintos condicionantes ambientales”
Actividad. Juego: clasifica en grupos.
Deberás ordenar y arrastrar las características que vayan apareciendo de acuerdo con el tipo de Web (1.0, 2.0, 3.0, 4.0) que consideres correcto. Al finalizar toma una captura de pantalla de tu resultado y muéstrala a tu Profesor para obtener la firma o sello correspondiente.
Marco Antonio Herrera Morales